jueves, 26 de noviembre de 2009

No tengo amigos

AVISO A NAVEGANTES:

Esto lo escribí hace como dos meses. Lo guardé como documento de Word hasta ahora porque no quería publicarlo. Me daba miedo que se malinterpretara y, a su vez, me daba cierta verguenza. Pero a estas alturas y después de las últimas entradas, ya me da bastante igual. Que cada uno opine como quiera y lo interprete como le salga del orto... Sin mas dilación, os dejo con la entrada.


No tengo amigos

Soy consciente que la frase que acabo de escribir es un tabú de cojones. Reconocer que no tienes amigos es admitir que eres menos que escoria, eres un disminuido social. La gente que no tiene amigos finge que los tiene o se los busca. Se apuntan al gimnasio, a clases de baile, a un club de solteros o a la Asociación de Buscadores de Tesoros. Cualquier cosa antes de asumir la soledad. Porque la amistad es un valor universalmente positivo que representa la fidelidad, la camaradería, el afecto desinteresado, la comunión con... ¡Y una mierda!

La amistad se ha convertido en una cuestión de estatus, una cifra en tu perfil de Facebook, un coleccionable para tener ocupados tus fines de semana, una convergencia de intereses. Tal como están las cosas un amigo tiene el mismo valor que un zapato: lo compras por capricho o necesidad, lo llevas durante el tiempo que re resulte cómodo y lo sustituyer cuando deja de serte útil. Los más vanidosos necesitan un armario completo y la gran mayoría lo van renovando sobre la marcha. A mi me da pereza. Y tengo asumido que soy un asocial por diversos motivos:

1 - No tengo paciencia para conservar amistades a medio gas (O lo que es lo mismo: Ya no son lo que eran)
2 - La mayoría de la gente me produce desprecio o no me interesa
3 - La mayoría de la gente no tiene ningún interés en mi o me desprecia
4 - Soy un orgulloso de mierda y tengo facilidad para mandar a tomar por culo a quien me jode
5 - Soy un idealista y aspiro a cosas que ya no existen

Cuando el otro día un conocido me dijo que vivíamos en un mundo donde "las relaciones personales te emocionan menos tiempo que un politono" y que "puedes fiarte más de tu microondas que de tus amigos", probablemente exageraba, pero seguro que no podía imaginar hasta que punto me identifico con sus palabras. Si me cruzara ahora mismo con el centenar largo de personas con las que he intimado en el transcurso de mi vida y apenas mantengo el contacto me podrían tachar de muchas cosas: de extremista, de aburrido, de estrafalario, de intolerante o de intrascendente, pero nunca de ser un mal amigo. Eso es todo lo que necesito para respetarme. Eso y follar con cierta regularidad.

1 comentario:

Aredhel Tassarthir dijo...

Pienso lo mismo que tú.Total, para que te sirven, a la hora de la verdad nada más que dan el coñazo. Para las risas sirve todo el mundo, pero cuando necesitas algo "serio" huyen despavoridos. (No me refiero a pasta,eso ya es otro cantar) Y digo yo...¿DE que coño sirven los amigos de facebook? Si nunca te dicen nada... Solamente para los juegos cutres esos de hacer cafeterias y tal...